La Metro Golden Mayer (MGM), el estudio del león rugiendo, sufre una bancarrota que puede acabar con muchos años de historia.
Y, como queda poco fondo en sus cuentas, sus accionistas y altos cargos han decidido jugarse todo su futuro con una sola película, o más bien dos, la esperada El Hobbit, precuela de El Señor de los anillos, dirigida por Guillermo del Toro y como guionistas, adaptando la novela de Tolkien, Peter Jackson Fran Walsh, Philippa Boyens y el propio del Toro.
Volver a ver en los cines a los Hobbits y el mundo creado por Tolkien le costará a MGM unos 250 millones de dólares, pues rodarán las dos películas a la vez para abaratar costes.
Si yo fuera Guillermo del Toro, tendría escalofríos sabiendo que de mi trabajo depende el futuro de un todopoderoso del cine como MGM.
Si El Hobbit arrasa en los cines, que será lo más seguro, la MGM tendrá unos años de alivio económico a no ser que siga produciendo películas que no tienen suerte en la taquilla.
Si todo va bien, El Hobbit se comenzará a rodar el próximo año por lo que para el 2011 lo tendríamos en cines.