Orlando Bloom se toma vacaciones indefinidas antes de preparar sus próximos proyectos. Bien por él que puede hacer eso. Si se lo digo yo a mi jefa me corta la cabeza y al día siguiente estoy en la cola del paro. Pero vaya, es lo que tiene ser uno de los guaperas oficiales de Hollywood, mal que le pese esa etiqueta.
Otra de las cosas que no fallan es que los actores americanos (de momento no veo a Segura en la Iglesia de la Cienciologia pero todo se andara) se busquen alguna religión de lo más chic y aseguren buscar un cambio en esa vida de lujo y desenfreno que tienen que soportar los pobres angelitos.
Bloom dice haber abrazado la corriente budista Sokka Gakka (me ahorro el chiste por respeto a los budistas) para estudiar lo que no funciona en su vida y usar la energia para seguir adelante y vivir mejor. ¿Mejor que lo que vive ya?, forrado de dinero, de vacaciones indefinidas, ¿que mas quiere este tio?
Por lo pronto le veremos el 25 de mayo en el estreno de Piratas del Caribe 3: En el fin del mundo
